martes, 5 de octubre de 2010

No me fío de la rosa (por Pedro Salinas)

No me fío de la rosa
de papel,
tantas veces que la hice
yo con mis manos.
Ni me fío de la otra
rosa verdadera,
hija del sol y sazón,
la prometida del viento.
De ti que nunca te hice,
de ti que nunca te hicieron,
de ti me fío, redondo
seguro azar.

8 comentarios:

  1. Lo único que permanece es el cambio.

    (PARMÉNIDES)

    ResponderEliminar
  2. Si en el sexto no hay perdón
    y en el séptimo rebaja,
    ya puede Nuestro Señor
    llenar el cielo de paja.

    ResponderEliminar
  3. Alifanfarón de la Trapobana18 de septiembre de 2012, 11:56

    ¡De paja, Cide! ¡Precisamente de paja...! (Qué grande es la sabiduría popular)

    ResponderEliminar
  4. Abril concluido, invierno ido.

    ResponderEliminar
  5. El que cierra los ojos es cómplice de aquello que no ha querido ver.

    (BENJAMÍN PRADO)

    ResponderEliminar

  6. Ni siquiera la sucesión prolongada de días prósperos es soportable.


    (GOETHE)

    ResponderEliminar
  7. Nadie es coherente del todo. Nadie es ni puede ser, del todo, consecuente.

    ResponderEliminar

  8. No se puede escribir todo con el cerebro o todo con el corazón. Porque lo que se escribe con el cerebro sale frío y lo que se escribe con el corazón sale blando.

    –¿Y entonces con qué escribimos?

    –Con el estómago y el hígado, naturalmente, con el bazo y los intestinos, con esa zona. Con las putas entrañas.

    (NEORRABIOS@)

    ResponderEliminar

¿Te gustó el poema seleccionado? ¿Crees que merece estar en zUmO dE pOeSíA?

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.