sábado, 28 de mayo de 2011

A Toisha me la mataron de un cañonazo (por Camilo J. Cela)

En este instante en que un dolor inmenso
es incapaz de hacerme mover un solo dedo,
yo te prometo, oh dulce esposa mía asesinada,
oh madrecita sin haber parido, oh muerta,
colgar tu atroz recuerdo cada noche de un pelo,
y que desiertos de tinieblas moradas
o amargas noches de insomnio y sobresalto
sean incapaces de ahogarme como a un niño.

8 comentarios:

  1. Enhorabuena por poner la opción de "entrada al azar" . Es una forma mucho más amena de navegar por vuestra macedonia de frutas poética. Felicidades.

    ResponderEliminar
  2. Complejidad no es oscuridad. Al igual que lo simple, lo complejo también puede y debe explicarse con claridad.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. "Complejo y claro", decía Borges sobre Ortega y Gasset.

      Eliminar
  3. Al atardecer de la vida te examinarán del amor.

    (JUAN DE LA CRUZ)

    ResponderEliminar
  4. Tan rico y tan de repente, no puede ser santamente.

    ResponderEliminar

  5. El enano ve gigantes por todas partes.

    (proverbio árabe)

    ResponderEliminar

  6. Cierran el bar
    donde –con café y libro-
    yo era feliz.

    (RAFAEL BALDAYA)

    ResponderEliminar

¿Te gustó el poema seleccionado? ¿Crees que merece estar en zUmO dE pOeSíA?

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.