el olor que tenía mi madre. Un sosegado
aroma de recato, sin explosión, esencia
íntima de un placer vivo y velado…
Cuando pasaba ella, lo dejaba tras sí
como una vaga estela de dolor resignado…
¡Domingos de mi vida! ¡Cielo azul de aquel pueblo
que pudo ser la dicha y sólo fue el cansancio!
como una vaga estela de dolor resignado…
¡Domingos de mi vida! ¡Cielo azul de aquel pueblo
que pudo ser la dicha y sólo fue el cansancio!
¡por mi nostalgia yerma, olor, como mi olor
de lágrima secreta y contenida…!, bálsamo
que al tiempo mismo es recuerdo y pesadumbre;
yo pude haberlo hecho y no lo hice…
de lágrima secreta y contenida…!, bálsamo
que al tiempo mismo es recuerdo y pesadumbre;
yo pude haberlo hecho y no lo hice…
¡El llanto no sirve para nada, cuando el remordimiento
no tiene cura, cuando
hay una cosa negra, que pudo ser de oro,
que no se borra, que es, como este olor, amargo!
no tiene cura, cuando
hay una cosa negra, que pudo ser de oro,
que no se borra, que es, como este olor, amargo!
La ciencia consiste más en destruir errores que en descubrir verdades.
ResponderEliminar(EINSTEIN)
Si quieres estar caliente,
ResponderEliminarcásate con la churrera,
y estarás toda la noche
churro dentro, churro fuera.