domingo, 3 de julio de 2016

A mí se me ha llevado sólo la juventud (por Miguel D' Ors)


Decir pestes de él tiene, sin duda,

un sólido prestigio literario

-tacharlo de asesino, por ejemplo,

o compararlo con

uno de esos ciclones con nombre de corista

que pasan y que dejan en los telediarios

un paisaje de grandes palmeras derrocadas

y uralitas errantes,

o simplemente lamentarlo a base

de tardes y de otoños en pálidos jardines-,

pero ahora, con la mano en el poema,

os lo confieso: he sido siempre yo

el que salió ganando de todos nuestros tratos.

A cambio de esta luz sabia y serena

con la que la experiencia ilumina las cosas

a mí se me ha llevado

sólo la juventud, ese divino

tesoro que no sirve para nada

-ya lo dijo Mark Twain- puesto en las manos

insensatas de un joven.


7 comentarios:

  1. Además tampoco puede quitarnos lo bailao.

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  2. Hay quien, para ahorrarse el trabajo de tener ideas, tiene ideología.

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  3. Yo me iba, mi madre,
    a la romería;
    por ir más devota
    fui sin compañía.

    Por ir más devota
    fin sin compañía;
    tomé otro camino,
    dejé el que tenía.

    Halléme perdida
    en una montiña,
    echéme a dormir
    al pie del encina.

    A la media noche
    recordé, mezquina;
    halléme en los brazos
    del que más quería.

    Pesóme, cuitada
    de que amanecía
    porque yo gozaba
    del que más quería.

    Muy biendita sía
    la tal romería.

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  4. El mal que hace uno es de un color que nos ensucia a todos.


    (JOSÉ MATEOS)

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  5. Parecen mis penas
    las olas del mar
    porque vienen unas
    cuando otras se van.

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