martes, 6 de diciembre de 2016

La aguja se detuvo (por Emily Dickinson)


La muerte da significado a cosas
en las que el ojo apenas se detuvo
a menos que un difunto
nos pida con ternura
que contemplemos sus pequeñas obras
al lápiz, o de lana,
«Fue lo último que hizo con sus dedos»
diligentes hasta el momento
en que el dedal pesaba demasiado
la aguja se detuvo —por sí misma—
y fueron colocados entre el polvo
en las estanterías del armario

Tengo un libro —que me entregó un amigo—
Con el lápiz —aquí y allá—
había señalado donde le apetecía
Descansan ya sus dedos
Y ahora no leo cuando leo
pues las intrusas lágrimas
destruyen los grabados
irreparablemente


4 comentarios:

  1. Nos sobreviven
    las gafas, el batín,
    las zapatillas.

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  2. ¿Qué intención tiene el todo?

    (CUMMINGS)

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  3. Toda la noche
    habló por mí la lluvia.
    Y tú dormías.

    (JOSÉ LUIS MORANTE)

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  4. Hay muchos locos que no están médicamente locos. Pasan por cuerdos pero a menudo están más locos que los loco "oficiales".

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