miércoles, 18 de enero de 2017

Jamás sentí que hubiera llegado (por Wole Soyinka)


Aunque llegué al final del viaje,
jamás sentí que hubiera llegado.
Tomé la carretera
que sube despacio la cuesta de las preguntas, y que me lleva
incluso a descender a la tierra que conduce a casa. Yo sé
que mi carne está limpiamente mordisqueada, perdida
para el perturbado pez entre las vainas susurrantes.
Yo los dejé atrás en mi ruta.

Y así también con el pan y el vino
necesito la repartición de derrota y carestía.
Yo los dejé atrás en mi ruta.
Jamás sentí que hubiera llegado.
Aunque amor y bienvenida me atrapan en casa.
Los usurpadores pasan mi copa en cada banquete 
como en una última cena.

5 comentarios:

  1. ¿Qué es llegar? Todos los lugares son de paso. Y al último lugar no se llega. Simplemente se nos para ahí el motor, se nos acaba el tiempo que nos fue concedido, pero no la partida, que sigue sin nosotros.

    ResponderEliminar
  2. Sí, Tragi; siempre sigue el tiempo de la viuda (viudos casi no hay).

    ResponderEliminar
  3. Londres, Berlín,
    Bagdad, Guernica...: todas
    bombardeables.

    (RAFAEL BALDAYA)

    ResponderEliminar
  4. La niebla esconde todo lo que no es ella misma.

    (TOMLINSON)

    ResponderEliminar

¿Te gustó el poema seleccionado? ¿Crees que merece estar en zUmO dE pOeSíA?

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.