Es tanto como el río,
como los firmes chopos,
esa rastrera mata
que pende de la orilla
inclinada hacia el cauce,
en hermoso equilibrio
a punto de romperse.
Oculta sus raíces,
no es honda, sino ancha,
tiene las hojas duras
y florece a destiempo.
Ni las cabras la quieren.
Pero cuando el deshielo
arrambla en su avenida,
sujeta las riberas,
las mantiene en su sitio.
Por ella, el río es río
todas las primaveras.
arrambla en su avenida,
sujeta las riberas,
las mantiene en su sitio.
Por ella, el río es río
todas las primaveras.
Aunque me voy, no me voy.
ResponderEliminarAunque me voy, no me ausento.
Aunque me voy de palabra,
me quedo en el pensamiento.
Atan más los papeles que los cordeles.
ResponderEliminarCuando habla un hombre sencillo, es una bendición. Habla, no parlotea.
ResponderEliminar(BERNHARD)
No me has roto el corazón
ResponderEliminarporque corazón no tengo,
te lo entregué una mañana
y tú lo echaste a los perros.