lunes, 19 de marzo de 2018

Mientras recuerdo las pálidas lagunas (por Ernesto Sábato)



Salude al Respetable Público.

Así,

muy bien,

tenga su terrón de azúcar.

Hop, hop!

Damas y Caballeros,

estrictamente para familias,

poderoso león de la selva: sueñas,

dócilmente ejecutas piruetas

preestablecidas

con leve y tierna y secreta ironía.

Pobres, al fin de cuentas,

hay chicos que me quieren,

así, una vueltita, salto al aro uno dos hop!

excelente

y sueño con la selva

en sus crepúsculos antiguos

mientras distraídamente hago las pruebas

correcta y buenamente salto por el aro en llamas

me ponen sobre una silla

rujo abstraído

mientras recuerdo las pálidas lagunas

en las praderas

a las que un día he de volver

ya para siempre

(lo sé, lo creo, lo necesito)

devorando a un domador

a título simbólico

como adecuada despedida

en un acto de locura

dicen los diarios

inesperadamente su cabeza desapareció entre las fauces

chorreando sangre qué horror!

cundió el pánico

mientras por el momento

sueño

con aquella patria violenta pero candorosa

el orgulloso principado

las ceremonias del huracán y de la muerte

prófugo de la vergüenza

desnacido de la suciedad de cerdo

a la castidad del pájaro y la lluvia

a la altiva soledad.

Pasen, Damas y Caballeros,

esta fiera está amaestrada

espectáculo rigurosamente para familias

aquí lo pueden ver, hop!

salude al Respetable Público

mientras medito en la selva dura pero bella,

en sus noches de luna

en mi madre.



5 comentarios:

  1. ¿Qué habrá en la cabecita del cautivo león? Nunca lo sabremos.

    ResponderEliminar
  2. No hay nada nuevo bajo el sol, pero ¡cuántas cosas viejas hay que no conocemos!



    (BIERCE)

    ResponderEliminar
  3. En la hora desnuda



    sólo eso



    un segundo de luz y paraíso





    de aquellos que la amaron



    sabe los rostros mudos y su temblor de ala



    todos



    juntos



    abran el cofre y vea ella



    esos diamantes escondidos





    libres



    al fin del cepo las palabras



    que mansamente caigan esos copos



    de nieve





    sin red



    en un segundo blanco



    sobre el regazo de su mirada cobijados



    de par en par



    las dos puertas abiertas



    sólo



    un paso





    decir adiós así





    que el saco no se cierre



    sin librarle a la voz de sus cadenas



    tacto



    y aire





    encuentre allí esa voz



    sus zapatos perdidos





    al fin cerrado el círculo del mundo





    en la hora desnuda



    sólo



    eso



    un segundo de luz



    y paraíso



    (ESPERANZA ORTEGA)

    ResponderEliminar
  4. El objeto del arte es quitar el polvo a la vida diaria de nuestras almas.

    (PICASSO)

    ResponderEliminar
  5. Es tanto lo que te quiero
    que no te puedo olvidar:
    de día en mi pensamiento
    y de noche en mi soñar.

    ResponderEliminar

¿Te gustó el poema seleccionado? ¿Crees que merece estar en zUmO dE pOeSíA?

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.