Un zumito de poesía, recién exprimida, para desayunar cada mañana. (Rico en vitaminas y antioxidantes. Muy muy nutritivo.)
sábado, 16 de junio de 2018
Quién sabe a dónde (por Carlos López Narváez)
La vida se me va… Quién sabe a dónde…
Con la luz parte…
Sigilosamente
de mí se aleja
sin decir a dónde.
Lo mismo que un amigo
que me abandona sin decir palabra,
que me abandona en soledad conmigo.
Si le pregunto: ¿A dónde vas, a dónde?
se sonríe nomás, plácidamente,
sin dejar de partir quién sabe a dónde.
Le grito con angustia:
Mírame aquí, viviente,
vivo.
¿A dónde
quieres que te siga? -Y
con risa mustia,
"Tú no eres yo"
-doliente me responde.
Nos dejamos llevar por el río de la vida. Claro que también el río se deja llevar por su cauce...
ResponderEliminarENMENDANDO A MANRIQUE
ResponderEliminarQué coño van a ser
nuestras vidas los ríos,
sino esos pececillos
-barbos, salmones, truchas...-
que nos hacen cosquillas.
La música es ruido sofisticado.
ResponderEliminarCuántos futuros posibles te has tronchado, cuán mellada está tu hacha de verdugo.
ResponderEliminar(NEORRABIOS@)
En medio de aquella calle
ResponderEliminartengo un diamante escondido:
Graciela lleva por nombre
y Acuña por apellido.