Siempre nos sentimos más jóvenes
de lo que somos.
Llevo dentro de mí
mis rostros anteriores,
como un árbol contiene sus anillos.
La suma de ellos soy yo.
El espejo no ve más que
mi último rostro,
mientras que yo conozco
todos los anteriores.
Pero también el pasado (nuestros yoes pasados) es una rémora, un lastre del que a menudo hay que desprenderse para volar.
ResponderEliminarQué importa la vida
ResponderEliminarque ya está perdida;
y después de todo,
qué es eso, la vida.
Cantando la pena,
la pena se olvida.
(MANUEL MACHADO)
Tendemos a dar tratamiento antropomórfico a realidades que nos superan. Como si éstas hubieran de ajustarse a nuestros esquemas terrícolas y cerebrales. Esas realidades no es que no quepan en nuestra mente, sino que son refractarias e incompatibles con ella.
ResponderEliminar