viernes, 6 de mayo de 2011

Inextinguibles ojos (por Marcel Proust)

Constelad por siempre el cielo de mi memoria,
inextinguibles ojos de aquéllas que amé.
Soñad como los muertos, fulgid como aureolas.
Como una noche de mayo brillará mi corazón.

5 comentarios:

  1. Algunas cosas se nos quedaron grabadas en el recuerdo para siempre; y aunque no las consideremos las más importantes de nuestra vida, el caso es que ahí siguen, grabadas a fuego en nuestras neuronas, mientras que otras, aparentemente más importantes o influyentes, las hemos olvidado. La capacidad de recordar no cumple órdenes, archiva y borra lo que le da la gana. Nadie manda del todo en su propia memoria.

    ResponderEliminar
  2. Un servicio para pobres acaba siendo un pobre servicio.

    ResponderEliminar

  3. Todas las ruinas son sagradas porque alguien un día las llamó hogar.

    (ANA PÉREZ CAÑAMARES)

    ResponderEliminar
  4. Que te espere alguien en algún sitio es el único sentido de la vida, y el único éxito.

    (VILAS)

    ResponderEliminar

¿Te gustó el poema seleccionado? ¿Crees que merece estar en zUmO dE pOeSíA?

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.