raro placer
del rencor disolviéndose
gota a gota licuándose
derretido rencor
por mi cuerpo escurriendo
ahora que estuve
en casa del odiado
ahora que probé
el desayuno del odiado
ahora que me puse
su jersey
sus zapatos
su corazón
su frente
ahora que entendí
un poco
al odiado
el rencor desprendiéndose
como un antiguo peso
que deja de pesar
el rencor disipándose
como un dolor rebelde
que para de doler
raro placer
del punzón ya arrancándose
del rencor que se suelta
y me suelta
El rencor como una pesada mochila, cargada de piedras. Te la quieres quitar y no se deja. Qué descanso si logras soltarla y quitártela del lomo.
ResponderEliminarSi me conociera a mí mismo, saldría corriendo.
ResponderEliminar(GOETHE)
ResponderEliminarCien amigos es poco. Un enemigo, demasiado.
(proverbio tibetano)
ResponderEliminarLo que llamamos
morir es solamente
cosificarse.
(RAFAEL BALDAYA)
Una tarde, borracha de tus uvas
ResponderEliminaramarillas de muerte, Buenos Aires,
que alzas en sol de otoño en las laderas
enfriadas del oeste, en los tramontos,
vi plegarse tu negro Puente Alsina
como un gran bandoneón y a tus compases
danzar tu tango entre haraposas luces
a las barcazas rotas del Riachuelo:
Sus venenosas aguas, vivoreando
hilos de sangre; y la hacinada cueva;
y los bloques de fábricas mohosas,
echando alientos, por las chimeneas,
de pechos devorados, machacaban
contorsionadas su obsedido llanto.
(ALFONSINA ESTORNI)
Todo aquello que te puedan preguntar y tú contestar está en tu conciencia.
ResponderEliminarElla aparecerá en los últimos momentos de tu vida. Sí. Se sabe. Han oido gritos de los agonizantes cuando la conciencia apareció ante sus ojos y les mostró toda su vida...
Sólo cabe esperar, no la justicia divina, sino la conciencia...
¿Existe?´¿ La tienen?
Y tú responderás , con la mentira , que de ella eres dueño y señor...No tengas miedo, no arremangues antes de tiempo, que quizás tienen pena por ti, mucha pena...
ResponderEliminarNo se puede sostener por mucha tiempo, se sabe, tarde, pero se sabe...