domingo, 13 de julio de 2014

Faro de mi alma (por Juan Ramón Jiménez)

Cuando te enciendes, faro de mi alma,
torre de ensueño,
y prendes en tu luz toda la vida
—este doble silencio, mar y playa—,
¡qué hermoso eres!

Luego, ¡qué triste
cuando estás apagado,
faro en el día, torre de ladrillo!

11 comentarios:

  1. El día del faro es la noche del alma.

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  2. A la vera de un sordo
    cantaba un mudo
    y un ciego los miraba
    sin disimulo.
    Palmeaba un manco
    y un cojo se arrancaba
    a bailar fandangos.

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  3. Aquí me bajo.
    Y el tren, indiferente,
    sigue su ruta.

    (ANDRÉS HURTADO)

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  4. Hay quienes tienen la sabiduría, y no la usan.

    (CICERÓN)

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  5. Los actos reprobables de un humano ensucian a toda la humanidad.

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  6. Al lado de la Estatua de la Libertad, debería haber una Estatua de la Responsabilidad.

    (GALBRAITH)

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  7. Plaza Mayor.
    Donde quemaban gente,
    hoy sirven copas.

    (CUQUI COVALEDA)

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  8. Quien no tropieza no aprende a caminar.

    (proverbio búlgaro)

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  9. La grandeza de una persona puede medirse también por su capacidad para encajar y relativizar sus propios fracasos.

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  10. La dosis precisa de suelo para sobrevivir.

    La dosis justa de suelo para reponer fuerzas y estirar las alas.

    La dosis mínima, la estrictamente necesaria dosis de suelo para seguir volando.

    (RAFAEL BALDAYA)

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