lunes, 24 de agosto de 2015

En el columpio (por Antonio Rivero Taravillo)


Sube

y

baja.

Cuando ese gafotas desciende,

yo asciendo;

y él se hunde

cuando remonto:

lo veo sumirse allí

con vista cansada,

y al elevarse

no reconocer sus ojeras.

En el columpio

de mi niñez

jugamos.

En el de la suya,

este intruso que hace

que en el parque infantil se haga de noche.

Con los pies en el suelo,

él es mis alas;

cada vez más arriba,

soy sus raíces.

La gravedad y su ley.

La ley de la grave edad.

Hay un momento en que están

a la misma altura nuestros ojos.

Es este.

Corro con pantalones cortos a casa.

Él arranca el coche, y se marcha

por calles que han cambiado de sentido

en un segundo,

en estos años.


8 comentarios:


  1. En ese columpio que va y viene se nos va y se nos viene (se nos vino y se nos fue) nuestra vida. Ah, pero ¿quién lo empujaba?

    ResponderEliminar
  2. Ni elegimos subir ni elegiremos bajar de ese zig-zag.

    ResponderEliminar
  3. Donde no puedas amar, pasa de largo.

    (NIETZSCHE)

    ResponderEliminar
  4. Toda ayuda que no se da a los otros, se pierde.

    (proverbio indio)

    ResponderEliminar
  5. Ningún Corán
    trae fotos de Mahoma
    volando al Cielo.

    (CUQUI COVALEDA)

    ResponderEliminar

  6. Cuando ya esta vida se ha cumplido y toca sus postrimerías, puede el hombre volver la vista para observar como si fuese ajena, su propia imagen, interrogándose no sin extrañeza acerca de este personaje que, día tras día y año tras año, ha ido forjando con los materiales de su existencia terrenal. […] La mente se obstina en una inquisición ociosa de este personaje desconocido que pude haber sido, que en definitiva seré yo.

    (FRANCISCO AYALA)

    ResponderEliminar

  7. Traicionado el amor, ya todo es nada.

    (MARIO MÍGUEZ)

    ResponderEliminar

¿Te gustó el poema seleccionado? ¿Crees que merece estar en zUmO dE pOeSíA?

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.