sábado, 24 de septiembre de 2016

Pero qué falta (por Julio Cortázar)


Por veredas de sueño y habitaciones sordas
tus rendidos veranos me aceleran con sus cantos
Una cifra vigilante y sigilosa
va por los arrabales llamándome y llamándome
pero qué falta, dime, en la tarjeta diminuta
donde están tu nombre, tu calle y tu desvelo
si la cifra se mezcla con las letras del sueño,
si solamente estás donde ya no te busco.


4 comentarios:

  1. Se van los que amamos y nos quedan su nombre, sus apellidos, su última dirección, su número de teléfono. ¿Y todo esto para qué?

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  2. Para que vivas, rías, llores, ames, sufras y cuando te llega la hora a ti a lo mejor ni te enteras...
    Laura

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  3. Poncio Pilatos
    a Jesús interroga
    sin traductor.

    (RAPHAEL BALDAYA)

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  4. RAMÓN y sus greguerías19 de enero de 2017, 16:03

    El agua se suelta el pelo en las cascadas.

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