domingo, 1 de abril de 2018

Mi pájaro familiar (por Henri Michaux)


El pájaro que se pierde.

Aquel está en el día en que aparece, en el día más blanco. Pájaro.

Aletea, se vuela. Aletea, se pierde.

Aletea, reaparece.

Se posa. Y después no está más. Con un batir de alas se ha perdido en el espacio blanco.

Así es mi pájaro familiar, el pájaro que acude a poblar el cielo de mi pequeño patio. ¿Poblar? Ya se ve cómo…

Pero me quedo en el lugar, contemplándolo, fascinado por su aparición, fascinado por su desaparición.



5 comentarios:

  1. Aún no existían
    las notas musicales
    y él ya trinaba.

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  2. Quien se emociona por lo simple suele no ser simple.

    (NAROSKY)

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  3. La ideología es un búnker cognitivo.

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  4. Pasa a la Historia
    por una palangana
    Poncio Pilatos.

    (CUQUI COVALEDA)

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  5. Ahora está trabajando, en una habitación
    no distinta de esta
    en la que yo escribo o tú lees.
    Su mesa está cubierta de papel.
    Una pantalla podría atenuar
    la luz de la lámpara, disolviendo la potencia
    de la única bombilla,
    pero no; la ha quitado.
    ¿Sus poemas? Nunca los conoceré,
    aunque son los que más necesito.
    Ni siquiera puedo descifrar
    el alfabeto en que escribe. Su silla…
    Supongamos que es de cuero
    o de lona, de plástico o de mimbre. Dejemos
    que tenga una silla, su lámpara sin pantalla,
    la mesa. Dejemos que en la habitación contigua
    haya uno o dos a los que ama. Dejemos que la puerta
    esté cerrada, que los que duermen estén sanos.
    Dejemos que tenga tiempo, y silencio,
    papel suficiente para equivocarse y continuar.

    (JANE HIRSHFIELD)

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