domingo, 2 de diciembre de 2018

Ni a quién preguntar (por Vicente Luis Mora)


Somos niños
con un juguete
enorme,
recién desenvuelto
pero desmontado,
sin manual
de instrucciones.

Sostenemos
las piezas
en la mano,
con la sonrisa
helada,
sin saber
qué hacer
ni a quién
preguntar,
porque no hay padre.



3 comentarios:

  1. Somos huérfanos porque el universo no puede o no quiere ejercer de padremadre.

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  2. En el quieto punto del mundo que gira.
    No era carne, ni estaba sin ella;
    ni procedía de, ni iba hacia…
    En el quieto punto, allí está la danza,
    pero ni detenida, ni en movimiento.

    (T. S. ELLIOT)

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  3. Nadie murmure de nadie,
    que somos de carne y hueso,
    y no hay pellejo de aceite
    que no tenga su remiendo.

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