El difunto Buffalo Bill,
montado en plateado corcel
y fluido como el agua,
disparaba a los palomos:
¡bang, bang, bang y bang!
y atinaba todos los balazos.
¡Oh, qué galanura!
Y yo quisiera saber
qué tal se lleva usted
con ese apuesto joven
de ojos azules,
Señora Muerte
El canto de los pájaros
ResponderEliminaro el olor de la jacaranda en flor
en la honda madrugada
no tenderán a converger
en tu clara conciencia
de otra mañana jubilosa.
Faltará esa conciencia,
pero allí seguirán,
dando razón de ser a la mañana,
las flores y los pájaros.
Y nadie notará la diferencia.
(BENÍTEZ ARIZA)
(BENÍTEZ ARIZA)
ResponderEliminarNacer, crecer,
procrear, morir:
los 4 trámites.