En el océano del vacío
hay nombres, nombres, nombres.
En el océano de lo perdido
hay nombres.
¿Quién responde
a este chorro de alma
que los llama? Un oleaje
de nombres, nombres, nombres.
¿Qué los separa de la
grande muerte
en brazos ya de lo que
fueron?
Cuando voy a la casa
ResponderEliminarde mi chiquilla
se me hace cuesta abajo
la cuesta arriba.
El verbo leer, como el verbo amar y el verbo soñar, no soporta el modo imperativo.
ResponderEliminar(BORGES)
ResponderEliminarCesó la lluvia
pero sigue lloviendo
desde los árboles.
(CUQUI COVALEDA)
ResponderEliminarTodo lo que recuerdo tiene poco que ver con la verdad.
(VÍCTOR SALTERO)