jueves, 10 de julio de 2014

Ese trazo (por Álvaro Valverde)


Vivir es deslizarse, repetiste,
captar nuestra existencia de soslayo
o verla desde lejos, en lo alto,
con la perplejidad del que contempla.
Los que te conocieron aseguran
que tú viviste así, que no hubo nada
ni nadie que pudiera desviarte
ni un ápice siquiera de ese trazo
que le diste por fin a tu camino.
Esa senda emboscada conducía
a una casa perdida entre los páramos.
Sobre aquel pedregal erosionado,
bajo la ardiente luz de los veranos,
una sombra precisa dibujaba
el estupor final de tu extravío.
En ese santuario estableciste
una visión del mundo peligrosa.
Rogabas a los dioses con frecuencia
que no nos castigaran con desgracias
(capaces en su ardor de destruirnos)
sin antes enseñarnos lo importante:
la frágil transparencia de la vida.

4 comentarios:

  1. A veces parece que estamos fuera de nuestra propia vida, viéndola pasar, viéndonos pasar. Como si, más que vivir, fuéramos vividos.

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  2. No hay una Historia,
    no hay un Pasado al que
    querer volver.

    (CUQUI COVALEDA)

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  3. Los verdaderos amores
    se encuentran de tiempo en tiempo.
    Los que se ven cada día
    se mueren de aburrimiento.

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  4. Hay algo que Dios ha hecho mal. A todo le puso límites menos a la tontería.


    (ADENAUER)

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