viernes, 19 de enero de 2018

Nunca tan juntos (por Félix Grande)


La mujer de mi vida
duerme lucha en la cama a tos partida, contra
su catarro septuagenario.
Amor mío cúrate cúrame.
Tu tos brama en el cráter de mi miedo…

Cúrate, Curra. Tengo
una sorpresa polifónica
temblando en canas para ti:
¿Te acuerdas de hace medio siglo?

Contempla todo esto, mujer de tu hombre.
Pongo a tus pies mi oferta de alegría,
lo que me queda por vivir... Tenme.
Pongo a tus pies lo que me queda.

Siempre fuimos más jóvenes que hoy:
nunca tan juntos. Nunca tan destino.
Éste era el premio. Y aquí está. Y ahora:
precisamente arrugamente ahora.
Nuestra vida reunida, cauterizada, entera: mírala.
Mírale la carita a la palabra Ahora:
cinco letras omnipotentes.
...Yérguete de la silla. Apóyate en mi brazo.
Ponte guapa, que estamos convidados
a una pizca de tiempo inmenso.



3 comentarios:

  1. Esto es sólo para decir





    que me comí

    las ciruelas

    que había en

    la nevera



    y que

    probablemente

    guardabas

    para el desayuno



    Perdóname

    estaban deliciosas

    tan dulces

    y tan frías



    (WILLIAM C. WILLIAMS)

    ResponderEliminar
  2. Es más placer que pesar
    la herida que otro mal sana.
    Quien durmiendo tanto gana
    nunca debe despertar.

    ResponderEliminar

¿Te gustó el poema seleccionado? ¿Crees que merece estar en zUmO dE pOeSíA?

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.