miércoles, 25 de junio de 2014
Después del tiempo (por Octavio Paz)
¿Sólo en el tiempo soy? ¿Sólo soy tiempo?
¿Una imagen que huye de sí misma
y está más lejos mientras más se acerca?
¿Soy un llegar a ser que nunca llega?
Lo que fui ayer -las nubes, la muchacha,
y en recodo de cualquier momento
la no invitada sombra de la muerte-
no fue, no llegó a ser, no será nunca:
ayer está pasando todavía
y nunca acaba y nunca llega.
“Después del tiempo”: pienso, “está
la muerte
y allí seré por fin, aunque no sea”.
Mas no hay después ni hay antes y la muerte
no nos espera al fin: está en nosotros
y va muriendo a sorbos con nosotros.
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5 comentarios:
Estamos hechos de materia y tiempo. Salir del tiempo es ser inmortal. Con la muerte devenimos temporales, o sea, eternos pues lo eterno es lo temporal, lo que está fuera de la dictadura del tiempo.
Escribo intemporal y el puto teclado predictivo pone temporal. Lo eterno es lo intemporal . Creo que se entendió, recontrahuevos.
O sea. La muerte es salir del tiempo o ser intemporal . Sólo la intemporalidad es eternidad. Ambas palabras son sinonimas .
Unos los quiebran
y otros, SIEMPRE OTROS, pagan
los platos rotos.
(CUQUI COVALEDA)
El valiente muere una vez; el cobarde, muchas.
(IOWA)
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