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miércoles, 9 de septiembre de 2015

Por el balón (por Antonio Deltoro)


Entre la multitud que se agita como un bosque encantado,
libres del deber, por el gusto del pasto, en la delicia de ver rodar,
de sentir cómo nace del pie la precisión que en la vida normal le arrebató la mano,
estamos reunidos hoy en este campo donde no crece ni la cebada ni el trigo;
somos el coro que lamenta y que festeja,
el suspiro que acompaña al balón cuando pasa de largo y el grito entre las redes.
Nació la pelota con una piedra o con la vejiga hinchada de una presa abatida.
No la inventó un anciano, ni una mujer, ni un niño:
la inventó la tribu en la celebración, en el descanso, en el claro del bosque.
Contra el hacer, contra la dictadura de la mano,
yo canto al pie emancipado por el balón y el césped,
al pie que se despierta de su servil letargo,
a la pierna artesana que vestida de gala va de fiesta,
al corazón del pie, a su cabeza, a su vuelo aliado de Mercurio,
a su naturaleza liberada del tubérculo:
a cada hueso de los dos pies, a sus diez dedos
que atrapan habilidades hace milenios olvidadas en las ramas de los árboles.
Yo canto a los pies que fatigados de trabajar las sierras llegaron al llano e inventaron el fútbol.

6 comentarios:

F. dijo...

Sí, parece que la atrofia arbórea de los pies acaba y que sustituye a los sutiles engranajes de la mano, que decían que eran proyección de las funciones más sublimes del cerebro, del pensamiento elaborado del humano. El astrágalo, el calcáneo el metatarso, relegan a escafoides, trapecio, pisiforme...
Me preocupa que exista algún reflejo, relación, una influencia de la función del pie sobre el cerebro, y que del mismo modo que la mente se prolonga en la pinza de la mano y le dicta el justo movimiento, el trazo del pincel, el acorde, la caricia que expresa el sentimiento..., los torpes pies homínidos que ahora parece que despiertan de su simple función ambulatoria, le marquen al cerebro derroteros en el pensar antes aliado de la mano. incluso en la memoria. Y que así tenga justo cumplimiento ese aforismo que dice que algunos piensan con los pies.

Anónimo dijo...


Esto último, sin ir más lejos, es lo que le ocurre al defensa Piqué y a su ex-entrenador Guardiola.

F. dijo...

Qué vas a esperar, colega, de estos virtuosos de la coz.

Pablo M dijo...

El fútbol podrìa ser poético, pero sólo antes de la profesionalización. Poca poesía veo yo en los traspasos, los Messis, Ronaldos o Neymares, la infidelidad a otros colores distintos del dinero.

F. dijo...

No existe la poesía ni mucho menos la épica desde que desapareció el fútbol de los campos mayas. El Chichén Itzá F.C. era el que se llevaba para sus vitrinas la mayor parte de las cabezas cortadas de los capitanes perdedores. Qué tiempos, Pau.

Aldonza Lorenzo dijo...


De un ladrillo, no hagas un castillo.