un canto insidioso
que te halaga, te hace feliz.
Tus oídos se acostumbran a la mentira
y exigen, insaciables, su cuota de alabanza.
El deleite
sigue creciendo.
Te encumbras un poco más
y él desciende, sin temor, obsecuente.
La boca que te hablaba servil
ahora destila una miel asquerosa,
pero la recibes,
llegas por extraño conducto hasta tu entraña
y sientes un goce altísimo y secreto.
Ignoras quizás
que este placer está reservado a los necios.
Nada te importe,
oh cínico,
porque eres al fin el cómplice.
10 comentarios:
Toda gran idea provoca al principio escándalo o burla.
No pretendas apagar con fuego un incendio, ni remediar con agua una inundación.
(CONFUCIO)
Me opongo a las relaciones sexuales antes de la boda, por el peligro de llegar tarde a la ceremonia.
(RICCI)
Sólo los ojos limpios ven las cosas pequeñas.
(proverbio cantonés)
La verdad siempre resplandece al final, cuando ya se ha ido todo el mundo.
Los médicos tienen dos clases de letra. Una, ilegible, para sus recetas. Y otra, muy legible, para sus facturas.
(SCHOPENHAUER)
No poder y no querer, lo mismo vienen a ser.
No querer y poder, ya son ganas de joder.
No poder POR no querer...
Lo más sorprendente de la escuela es que funciona. Se propone como vehículo para socializar, uniformar y adoctrinar a la población... y lo consigue. Los niños entran a ella como una bandada de gorriones y años después salen en perfecta fila de a uno.
(NEORRABIOS@)
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