Como la rosa en el rosal...
así, armoniosamente,
sencillamente estaba la palabra
de paz sobre tu boca.
A ella hubiera ido
yo con las manos juntas
en cuenco tembloroso
a recoger frescura, verdad, amor...
Como la rosa en el rosal, así espaciaba
tu corazón fragancia; así volvía
blancura y suavidad la tierra que lo ataba...
¡Y así te hubiera amado, con la tierra
hecha luz en tu frente hacia la luz
por el instinto vertical del cielo!...
Y así pasaste de una tarde a otra,
breve y eterno... Como la rosa en el rosal.
3 comentarios:
Suficiente es mejor que demasiado.
(proverbio francés)
Cicatrizaron
ya todas mis heridas
excepto una.
(RAFAEL BALDAYA)
También de Dulce María Loynaz:
Porque ataron mis huesos
unos con otros, soy.
Porque algún día los desatarán
ya no seré.
Soy y no soy solo a través
de este poco de cal y de artilugio.
Camino y no me aparto de una vida
hecha ya de antemano
para la eterna inmovilidad,
de una muerte
enderezada brevemente.
Camino todavía,
pero mi propia muerte me cabalga:
Soy el corcel de mi esqueleto.
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