Así llenan los días
instantes hechos de esperar tus manos,
de echar de menos tus pequeñas manos,
que cogieron las mías tanta veces.
Hemos de acostumbrarnos a tu ausencia.
Ya ha pasado un verano sin tus ojos
y el mar también habrá de acostumbrarse.
Tu calle, aún durante mucho tiempo,
esperará, delante de tu puerta,
con paciencia, tus pasos.
No se cansará nunca de esperar:
nadie sabe esperar como una calle.
Y a mí me colma esta voluntad
de que me toques y de que me mires,
de que me digas qué hago con mi vida,
mientras los días van, con lluvia o cielo azul,
organizando ya la soledad.
4 comentarios:
Todas las cosas dicen que no estás / en los días que te han sobrevivido
El dolor que no habla gime en el corazón hasta que lo rompe.
(SHAKESPEARE)
Tal como la cita de Shakespeare que nos entrega "Fuego de palabras", el silencio del dolor rompe el corazón. Aunque, a veces, es necesario para no dañar.
Si hay abismos,
son nuestros abismos.
Si hay peligros,
intentemos amarlos.
Todo lo terrible quizá no es
sino algo desvalido que espera que nosotros
lo auxiliemos.
(RILKE)
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