debieran llevar todos
una nota adherida
un aviso en el pecho
o en la frente
un cartel que dijera
soy frágil
soy efímero
ahora valórame
si crees que soy querible ámame ahora
ámame intensamente
inmensamente
sin contención
sin freno
ahora que estoy aquí
que estoy contigo quiéreme
sí porque en algún paso o tramo inesperado
a una hora no prevista de un día que desconoces
inevitablemente
justo cuando parezca que nunca he de ausentarme
y más certeza tengas de que soy para siempre
me perderás
2 comentarios:
Nada es en propiedad. Todo lo que amamos es en alquiler, o incluso en precario.
Cuanto más difícil de conseguir, más fácil de perder.
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