jueves, 14 de octubre de 2010
Nada se restituye (por José Emilio Pacheco)
Bajo el mínimo imperio que el ver no ha roído
se derrumban los días, la fe, las previsiones.
En el último valle la destrucción se sacia
en ciudades vencidas que la ceniza afrenta.
La lluvia extingue
el bosque iluminado por el relámpago.
La noche deja su veneno.
Las palabras se rompen contra el aire.
Nada se restituye, nada otorga
el verdor a los campos calcinados.
Ni el agua en su destierro
sucederá a la fuente
ni los huesos del águila
volverán por sus alas.
se derrumban los días, la fe, las previsiones.
En el último valle la destrucción se sacia
en ciudades vencidas que la ceniza afrenta.
La lluvia extingue
el bosque iluminado por el relámpago.
La noche deja su veneno.
Las palabras se rompen contra el aire.
Nada se restituye, nada otorga
el verdor a los campos calcinados.
Ni el agua en su destierro
sucederá a la fuente
ni los huesos del águila
volverán por sus alas.
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6 comentarios:
Si supiéramos dónde nos metemos, nunca haríamos nada.
Quien tiene arte va a cualquier parte.
Todo lo que haces para mí pero sin mí, lo haces contra mí.
Nada es bonito para el que le duele algo.
(proverbio tailandés)
Ha de existir
sin crueldad ni abyección
otro universo.
(RAPHAEL BALDAYA)
El tonto que dice "algo es mejor que nada" es mucho más inteligente que el listo que no acepta ninguna cosa a menos que sea óptima.
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