zUmO dE pOeSíA

zUmO dE pOeSíA
de todos los colores, de todos los sabores

ALEATORIUM: Saca un poema de nuestro almacén

Ver una entrada al azar

lunes, 10 de enero de 2011

Al pensar en los viejos errores (por José Luis Piquero)

Ese vértigo-abajo de los días peores
al fin no es más terrible
que ese vértigo-arriba de la infancia
mientras alguien se inclina hacia nosotros
desde torres monstruosas y nos deja
un pellizco de susto en la mejilla.

Acaso tu problema fue quedarte
en aquellas regiones tanto tiempo
y no haber asumido esta estatura;
ser siempre el niño atónito
al que cambiaban sustos y juguetes
por miradas de pasmo y unas gracias.
Apostaría a que fuiste un niño silencioso.

De las mañanas tontas de cafés y sin clase
(hace no muchos años) me han quedado
unas cuantas imágenes sucesivas de ti:
Pelayo en blanco y negro, muy de acuerdo
con lo que ha dicho alguien y está claro.
Pelayo un disparate de voces, consiguiendo
que nos echen. Pelayo
con la mirada fría y en silencio. Por fin,
Pelayo desolado frente al vértigo
de sus peores días, ya inconexo y terrible,
lejos de todos, roto.
Lo confieso:
Casi te aborrecí por habernos dejado
solos, por asumir
ese papel confuso, desgraciado, que hacía
de nosotros inútiles testigos
de tu dolor, figurones sin frase;
y porque nos pusiste
frente a frente con algo que se parece al miedo.
Eras un ser extraño: un pez de charco,
un comedor de tierra, un joker triste
perdido no sé dónde entre los naipes,
y me acuerdo de días
en que te despedí ya para siempre
y ya sin sentir nada.

Vienen luego
las escenas cruentas: Un cristal
que se rompe. Gritos en la escalera.
Alguien que pide un taxi. Una bufanda
empapada de sangre. La negrura
del lobo en una cándida cama del hospital.

No fueron buenos tiempos, quién lo duda.

Pero hoy que, ya de vuelta de esos años,
sano y salvo, te sientas junto a mí,
pido café y charlamos tan a gusto,
e incluso nos reímos al pensar
en los viejos errores, yo quisiera
saber más, comprenderlo.

Preguntarte (quizá porque es preciso
saber que hubo una justificación
para tanto dolor) qué te tentaba
del lado oscuro, si valió la pena
y si aprendiste algo. O si fue sólo
una forma egoísta de salvarte,
o un ajuste de cuentas con la vida
y el ensayo de otra vida imposible.

O simplemente eras como un niño
rompiendo en mil pedazos el espejo,
dando cuerda al reloj de tal manera
que aún le dicen dormido,
sin escuela, y se ríen.

9 comentarios:

F. dijo...

Paso por aquí y os dejo un saludo, cuates.
Norabuena, los poetas os observan.
Salud.

Emilia Alarcón dijo...

Hola, F., nos parece muy bien que pases y mucho mejor que saludes. Seguro que coincidimos también en el Café Arcadia.

F. dijo...

He leído tu argumentación del otro día en el Café, cuando razonabas sobre el componente autobiográfico (los deseos también son biografía) de los sueños. No puedo estar más de acuerdo.
No he podido sino esbozar una sonrisa, al recordar algo paródico que escribí hace tiempo a una amiga en un blog: figuraba ella ser la Ligia de Quo Vadis? y yo el tribuno Marco Vinicio. La muy casquivana pregunta al romano sobre si no había tenido alguna vez determinado sueño... A lo que el puro purísimo Marco (servidor) contestaba pelín ofendido:

"¡Maldita sea, Ligia...! ¿Cómo se te ocurre venir a mí con comentarios tan peregrinos, tan poco dignos de una patricia, de la esposa de Vinicio?.
¿Acaso ignoras que los fantasmas con que Somnus puebla nuestros sueños son extraídos del arca que, día a día, vamos llenando con nuestra vivencia y nuestros pensamientos? Pues nada mora en aquellos que no sea parte del imaginario propio, de nuestros deseos más recónditos, de nuestro almario. Y así, quienes viven en la nube esplendorosa de las ideas nobles, tendrán sueños acordes con tal nobleza."

A veces, en la farsa, se dicen verdades.

Beso.

ZUMO DE POESÍA dijo...

F, estoy completamente de acuerdo. El subconsciente organiza un montaje muy curioso a partir de todo lo que vivimos, sentimos, pensamos, imaginamos, gozamos, sufrimos... en la vida consciente. Y este montaje, de una u otra forma, es una obra creativa, porque supone crear algo que antes no existía, a partir de la "realidad real". O sea, que sí, todos somos artistas, creadores, directores de cine, actores y guionistas. Un beso, y un verso, de EMILIA ALARCÓN.

Carlos Cay dijo...

Justo estoy leyendo los "Aflorismos" de Carlos Castilla del Pino (Aflorismos porque afloran) y viene uno que dice que "Hay errores en la vida y hay vidas erradas. No es lo mismo". Leer lo que cuenta el poema me lo ha confirmado.

Círculo Cultural FARONI dijo...

Es más fácil unir a la gente alrededor del odio que en torno a cualquier emoción positiva.

(LAURENCE REES)

Cide Hamete Benengeli dijo...


El novio mira a la novia
y le parece divina.
Lo mismo piensa el cochino
cuando mira a la cochina.

Dimes Y Diretes dijo...


A veces hay que abandonar la batuta para no molestar a la orquesta.

(VON KARAJAN)

hAiKu dijo...

En cada tránsito,
trasbordo o desembarco,
juegas con fuego.

(CUQUI COVALEDA)