Yo no era más que aquello que tú
con la mano acariciabas,
allí donde en noche de pavor,
cerrada, la frente reclinabas.
Yo no era más que aquello que tú
distinguías allá, abajo:
primero, solamente imagen vaga,
mucho después, también los rasgos.
Tú fuiste quien, ardiendo,
creaste en un susurro
las conchas de mi oído,
el diestro y el siniestro.
Tú quien, meciendo la cortina
en el mojado cuenco de la boca,
me plantaste la voz
que te llamaba a gritos.
Yo estaba ciego, simplemente.
Y tú, escondida, brotando,
me obsequiabas el don de ver.
Así es como se deja rastro.
Así es como se engendran mundos.
Así, a menudo, tras crearlos,
los dejan dando vueltas
dilapidando los dones.
Así, ora al fuego lanzado,
ora al frío, ya a la luz, ya a lo oscuro,
perdido en la creación del mundo
el globo va girando.
2 comentarios:
En inglés no nacimos: fuimos nacidos (we were born)
En inglés no nos enamoramos: caemos en el amor (we fall in love)
Definitivamente el inglés es más certero.
Si de verdad lloviera,
a cántaros, y no estas tristes gotas
que el vendaval dispersa
y agita alrededor.
Si de verdad lograra
arrancar con su furia el polvo
adherido a las hojas, al asfalto,
a la rugosa piel de las fachadas.
Si de verdad limpiara,
como un cristal, el cielo,
disolviendo la bóveda asfixiante,
brotaría en las calles
un vergel luminoso
de rostros bendecidos.
(SUSANA BENET)
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