viernes, 16 de julio de 2010
A qué este vano empeño (por José Luis García Martín)
¿A qué grabar un nombre en las paredes,
manchar con torpes trazos la blancura
deslumbrante, impoluta, de la nada?
¿A qué este vano empeño de ir dejando señales,
de escribir en la arena, a resguardo del viento,
las triviales miserias que conforman tu vida?
Sobre las tercas líneas que dibujan un rostro
ha de pasar la mano piadosa de los años
borrando letras, sílabas, palabras sin sentido.
El papel en que escribes volverá a estar en blanco.
¿Y habrá dicha mayor que no haber sido?
manchar con torpes trazos la blancura
deslumbrante, impoluta, de la nada?
¿A qué este vano empeño de ir dejando señales,
de escribir en la arena, a resguardo del viento,
las triviales miserias que conforman tu vida?
Sobre las tercas líneas que dibujan un rostro
ha de pasar la mano piadosa de los años
borrando letras, sílabas, palabras sin sentido.
El papel en que escribes volverá a estar en blanco.
¿Y habrá dicha mayor que no haber sido?
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7 comentarios:
Todo lo limpio es bonito, menos el bolsillo.
Dime con quien andas y si está buena me la mandas.
Nadie es feliz a menos que crea serlo.
(PUBLILIO SIRO)
Vente conmigo y haremos
una chocilla en el campo
y en ella nos meteremos.
Hasta que es padecido, el mal no es conocido.
A la mar van a parar,
morena, todos los ríos
y allí se habrán de juntar
tus amores con los míos.
Un niño juega
a enterrar a su padre.
Día de playa.
(SUSANA BENET)
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