Somos como los siglos
antes de separarse.
Espera un poco más, amor,
que el mar está lloviéndose aún,
que no llegamos tarde.
Que ya no teme la semilla
caer sobre la roca,
y el silencio y la oscuridad se besan,
y mi mano te busca,
y hay otros en nosotros que se tocan
sus pieles encendidas.
Estar desnudos es venir de lejos
y siempre estar llegando.
Espera un poco más, amor,
que nada es poco para los que esperan tanto.
Que el aire se hará llama,
como la voz aliento,
como ahora es de noche
y el ojo mira las estrellas,
y las estrellas miran hacia dentro.
2 comentarios:
Es amputante y mutilante, después de haber sido dos (o en todo caso más de uno), volver a ser nada más que un@ sol@ y únic@.
El trato era que nos amáramos hasta que desaparecieran los miedos.
El trato era que nos acariciáramos hasta que limpiáramos el cielo.
El trato era que cantáramos aunque el barco se estuviera hundiendo.
El trato era que bailáramos mientras explotaba el universo.
El trato era que nos quisiéramos como si fuéramos dos perros
mojados y hambrientos bajo la lluvia de enero.
Durmiendo debajo de un puente, enamorados, queriéndonos.
El trato era que nos amáramos como si no hubiera invierno.
(ALEJANDRO SANZ)
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