domingo, 27 de marzo de 2011
Generaciones (por Ana Pérez Cañamares)
Antes de morir, mi madre dijo mamá, ven
mientras me miraba sin verme;
yo dije mamá, quédate
abrazando su cuerpo diminuto
envuelto en pañales y olor a talco;
mi hija dijo mamá, no llores
y me acarició la cabeza consolándome.
Cuando mama murió, durante unos segundos
no tuvimos muy claros los lazos que nos unían
no supimos quién se había ido
y quién se había quedado
ni en qué momento de nuestras vidas
estábamos viviendo
o muriendo.
mientras me miraba sin verme;
yo dije mamá, quédate
abrazando su cuerpo diminuto
envuelto en pañales y olor a talco;
mi hija dijo mamá, no llores
y me acarició la cabeza consolándome.
Cuando mama murió, durante unos segundos
no tuvimos muy claros los lazos que nos unían
no supimos quién se había ido
y quién se había quedado
ni en qué momento de nuestras vidas
estábamos viviendo
o muriendo.
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9 comentarios:
Gracias ;))
Como siempre, es un honor para nosotros que nuestros propios "poetas seleccionados" tengan a bien visitar nuestro humilde blog. GRACIAS A ANA.
Horario de verano, que me robas mientras duermo.
Nos quieren robar todo. Hoy, una hora (se pueden hacer tantas cosas en una hora...). Me han robado una hora de mi vida, sí. Y no estoy yo para dilapidar aquello que me chorrea entre los dedos, esa incoercible hemorragia de segundos, la vida que se escapa...
¿A dónde han ido a parar los minutos de esa hora no nacida?
Tempus fugit... No le ayuden, por favor, que ya me parece que hace tiempo que aprieta el paso, y me sobrecoge pensar que aquellos que tomo por cerros azulados del horizonte sean en verdad las tapias del innombrable.
Pero Mar Remoto, piensa que la hora robada ahora, en primavera, te la devolverán en otoño. Nunc in prima vera tempus fugit, sed in autumno tornabit. ¿Lo habré dicho bien? ¡Si parezco Julio César!
Ya, fíate tú de que nos la devuelvan...
Y, además, ¿quién me asegura a mí que voy a llegar al otoño?
Me jodería irme con deudas pendientes de cobro.
Porque una hora es mucho tiempo para que se la afanen a uno.
Lo inefable suele durar menos de una hora. Si repites, ya no es lo mismo.
Y eso, que no me fío.
Mi sentido del humor consiste en decir la verdad.
(WOODY ALLEN)
De mercader a ladrón, sólo hay un escalón.
Valemos más por lo que callamos que por lo que decimos.
Platicar es una bella palabra que está perdiéndose. Y es una lástima. Es una linda palabra porque conversar es muy serio, charlar suena demasiado banal o frívolo, hablar (`Ya hablaremos’) suena muy agresivo, muy negativo. En cambio, platicar es algo sereno.
(BORGES)
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