recuerdo el día que nací.
llovía y los árboles soltaban todos sus frutos, la fertilidad
de los ríos era capaz de matarnos.
recuerdo el día que nací.
tenía los ojos ciegos, la boca muda y el alma intocable.
mi padre me prestó su mano para que yo no supiera
qué hacer con ella.
amo las manos de mi padre, origen de toda creación
y de la fe.
recuerdo los abismos del vacío, los límites, el calor
del alba sobre mi nuevo rostro.
mis manos extendidas al no saber.
2 comentarios:
Yo no me parezco a mí mismo.
(PESSOA)
Yo no me parezco a mí mismo.
(PESSOA)
Publicar un comentario