jueves, 19 de mayo de 2011
Arrumbados (por Saiz de Marco)
Oh sueños que dejé tan arrumbados
varados en la costa del olvido
que no os di de comer ni de beber
que no os vestí ni cuidé de vosotros
como un padre que abandonó a sus hijos
que no os abrí la puerta de mi casa
y ni siquiera me digné ayudaros a que os buscarais la vida ahí fuera
pobrecillos por mí tan maltratados
tan dejados de la mano de dios
del microdiós que os soñaba o sea yo
¿cómo podría deciros que lo siento?
¿cómo me haría perdonar de vosotros?
varados en la costa del olvido
que no os di de comer ni de beber
que no os vestí ni cuidé de vosotros
como un padre que abandonó a sus hijos
que no os abrí la puerta de mi casa
y ni siquiera me digné ayudaros a que os buscarais la vida ahí fuera
pobrecillos por mí tan maltratados
tan dejados de la mano de dios
del microdiós que os soñaba o sea yo
¿cómo podría deciros que lo siento?
¿cómo me haría perdonar de vosotros?
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5 comentarios:
Pues en eso estamos, en no permitir que nos roben nuestros sueños. Ahora o nunca ¡¡¡¡¡Cada cual en su ciudad a las concentraciones!!!!!
Sí, M.A.. Y lo que hace falta es que esto no muera el domingo, sino que siga y siga y siga. Para que los políticos se sientan vigilados, controlados, supervisados por la gente, y sepan que esta sociedad está harta de ellos y sus corrupciones. Que, como nos vengan otra vez con gúrteles, EREs con intrusos, obras faraónicas para financiar mordidas y comisiones encubiertas, financiaciones ilegales, etc..., esta sociedad está dispuesta a cualquier cosa. Hasta a echarse al monte si hace falta.
Menos funda, y más enjundia.
Manos que trabajan, no son manos, sino alhajas.
Videoclubs, cines,
librerías que cierran.
Amputaciones.
(CUQUI COVALEDA)
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