vivir el uno sin el otro:
miedo a estar alejados
en el viento de la niebla,
en los pasos del día,
en la luz del relámpago,
en cualquier parte. Miedo
que les hace abrazarse,
unirse en este aire
que ahora juntos respiran.
Y se buscan y se buscan
esa flor instantánea
que cuando se consigue
se deshace en un soplo
y hay que ir a encontrar otras
en el jardín umbrío.
Miedo; bendito miedo
que propicia el deseo
la agonía y el rapto,
de los que mueren juntos
y resucitan luego.
4 comentarios:
Lo que no da miedo no es importante.
En el trigal
reina entre lo amarillo
una amapola.
(RAPHAEL BALDAYA)
A ningún pez le conviene que el río se seque.
(proverbio japonés)
No son bellas las flores de la vid, pero sin ellas no habría el vino que aprecian hasta los dioses.
(OVIDIO)
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