No hay mucho que hacer en mi memoria.
Caminar una casa derribada a balazos,
atravesar arañas con palabras,
buscar viejos olores quemados por el viento.
Poco que hacer allí,
mear en los rincones para espantar las sombras,
correr donde no hay nadie.
¿Qué hacer en la memoria?
¿Descansar en un ruido?
¿Ponerse de rodillas ante un gran agujero?
4 comentarios:
Y además, allí donde la toques la memoria duele.
Las pesadillas son imaginación, pero el miedo que sientes durante ellas es real.
Los parásitos prefieren al animal más fuerte y sano, para mejor nutrirse de él.
(NIETZSCHE)
Suficiente es mejor que demasiado.
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