viernes, 14 de octubre de 2016
Partes blandas (por Agustín Fernández Mallo)
Esta noche he estado trabajado en la siguiente idea, que extraje de un libro del paleontólogo Stephen Jay Gould: su profesión se enfrenta a una frustración irremediable, los registros fósiles siempre son sólidos, principalmente huesos y dientes que nada informan de las partes blandas de los cuerpos, sujetas a descomposición. Así, los paleontólogos deben inferir esas otras partes, o fiarse de relatos orales o dibujos en caso de existir. Creí entender entonces que no sólo la paleontología sino todas las reconstrucciones del pasado, ya sea remoto o reciente, se hacen a través de esquemas ciertos (residuos sólidos) y material inventado (partes blandas). Así la historiografía, así las religiones, así las ideologías, así los noticiarios. Hallamos hechos como se hallan dientes y huesos, estructuras sólidas a las que cada generación añade órganos de innumerables formas hasta conformar su propia idea de cuerpo vivo y muerto al mismo tiempo.
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5 comentarios:
No es una piedra;
es el hueso de un muerto.
-¿Y qué más da?
(RAPHAEL BALDAYA)
La cabeza es redonda para que el pensamiento pueda cambiar de dirección.
(PICABIA)
Tu argumentación es razonable y voy a revisar mi punto de vista.
(NADIE, NUNCA)
Quien siembra malas pepitas, recoge malas sandías.
a pesar de todo lo que respira
y se mueve, porque el Destino
(con las más largas manos blancas
puliendo cada pliegue)
deslavará del todo mi memoria y la tuya
antes de abandonar mi cuarto
me vuelvo (e inclinándome
por entre la mañana), beso
esta almohada, amor mío,
donde nuestras cabezas vivieron y fueron
(CUMMINGS)
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