miércoles, 25 de diciembre de 2013
No volveré (por Ray Bradbury)
No me atrevo a ir. En la isla hay fantasmas
y en las costas, tormentas espectrales,
aguaceros que lloran su pérdida con lágrimas
hasta que al fin me ahogo en el pasado.
La última vez que anduve por las calles dublinesas
mi mirada era clara, el pulso fuerte.
Pero ahora que se me ha ido media vida o más,
no puedo enfrentarme a la triste aurora de Dublín.
Los libreros que entonces me atendieron
están grises y demacrados, ¿cómo es posible?
El personal del hotel ha desaparecido,
algunos sobreviven como espectros, los demás ya ni existen.
¿Los vendedores ambulantes, mendigos, camareras,
duermen bajo las sombras de Maynooth
como artistas de O’ Connell? Se fueron para permanecer
diseminados dentro de las colinas de Bray.
Sus felices rostros emergen y se propulsan
a través de mi vida para materializar cada sueño.
Por tanto, ¿a Irlanda? No, no volveré
a donde los fantasmas arden en tormentas de humo.
No volveré a pasear por Dublín,
no soporto esa lluvia angustiosa
que derrite a la juventud, la disuelve en el mar
y acaba con mi alma, con mi corazón, conmigo.
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2 comentarios:
conmovedor
Lo que no fue
pero pudo haber sido,
¿por qué no fue?
(RAFAEL BALDAYA)
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