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miércoles, 20 de diciembre de 2017

Ya es invierno (por José Lupiáñez)


Sobre las tejas el verdín progresa.
El cielo está muy gris, pero la lluvia
ha cesado un instante. Hace frío
y los pájaros todos tiritan escondidos
entre las frondas...
En las ramas heladas de los árboles
las gotas milagrosas se transforman en perlas.
Un vaho azul escapa de la tierra.
Al fondo, las montañas se ocultan recelosas
en las nubes más bajas.
El alma reconoce estos paisajes,
a los que fue marcando, a través de los siglos,
la vida con su drama; estos valles que guardan
en su entraña, con celo, rescoldos de la historia.
Ya es invierno y desde las techumbres
de las casas de piedra
asciende el humo denso de los viejos hogares.
Yo arrimo el leño al fuego que caldea mi rostro
y siento que las llamas, crepitando, me avisan
de que la vida es breve.


6 comentarios:

casa de citas dijo...

Cuando la naturaleza proyecta que un individuo haga de explorador, no le equipa más que con deseos y le deja que encuentre su propia ruta.

(CAJAL)

batiBURRILLO dijo...

Me digo adiós a mí mismo en la víspera de la tiniebla.
Y ahora la noche cae. Trae la causa perdida.
Mi mano no toca ya el cuerpo bien amado.

(LÊDO IVO)

cajón desastre dijo...

Son tantísimos los mediocres, por no hablar de los tontos, que han escrito libros que podemos estar seguros de que bibliotecas enteras apenas sirven como registro histórico de la ceguera y la estupidez de la humanidad. De todo ello se deduce que cuando el amor a los libros no está guiado por una mente iluminada constituye una de las pasiones más ridículas.

(D' ALEMBERT)


casa de citas dijo...

El pueblo necio fabrica él mismo las mentiras para después creerlas.

(DESCARTES)

TóTUM REVOLùTUM dijo...

Mujeres que pasáis por la Quinta Avenida
tan cerca de mis ojos, tan lejos de mi vida...

(TABLADA)

Lloviendo amares dijo...

¿Cuántas estrellas de Belén arden brillantes
más allá de Orión y del arco enceguecedor del Centauro?
¿Cuántos milagros de nacimiento inocente
han bendecido esos mundos?

¿Tiembla allí Herodes
en temible facsímil de nuestro oscuro y asesino Rey?
Ese loco guardián de un reino imaginario,
¿envía a extraños soldados
a matar a los Inocentes
de otras comarcas,
más allá de la Nebulosa de la Cabeza del Caballo?

...Cristo deambula por el Universo,
carne de estrellas,
asume formas de criatura
para adecuarse a los más suaves elementos,
se viste de carne más allá de nuestra vista.
Allí camina, se desliza, vuela, tropezando extrañado.
Aquí conduce a los Hombres.


(RAY BRADBURY)